La dermatitis de contacto vulvar es un problema común, afecta de manera importante la calidad de vida de las mujeres que la padecen. La dermatitis por contacto resulta por la exposición de agentes externos, que actúan como irritantes o alergenos, entre ellos los jabones intímos, cuyo uso es cada vez más frecuente.
La piel de la vulva, al igual que el resto tiene las mismas funciones que el resto de la piel. La función de barrera es la que fácilmente se pierde por humedad, descarga urinaria, vaginal y fricción, provocando que la piel sea sensible a sustancias externas y reaccione fácilmente, puede estar afectada por otras enfermedades preexistentes donde se agregan sustancias alergénicas o irritantes.
Cualquier parte de la vulva puede verse afectada, desde el monte de venus hasta el ano, incluso en las partes internas de los muslos. La extensión de la erupción dependerá del área en que el producto contactó con la piel y de la sensibilidad del individuo a ese producto.
El principal síntoma de la dermatitis es irritación en la región vulvar; puede presentar síntomas como comezón, ardor y dolor.
¿Cuáles son los diferentes tipos de dermatitis de contacto?
Dermatitis de contacto Irritativa (esta es la forma más frecuente). Es causada por el contacto con un agente irritativo que lesiona la piel. La exposición repetida a agentes irritantes como los jabones geles o cremas íntimas, pueden también eventualmente lesionar la piel causando una dermatitis de contacto irritativa. La orina y el flujo vaginal cuando contactan con la piel, pueden también causar una irritación.
Dermatitis de contacto alérgica: provocada por la exposición a una sustancia o material al que se ha vuelto sensible o alérgico, Algunas de las posibles causas de tal reacción en la vulva son la benzocaína (se encuentra en cremas anestésicas), neomicina (cremas antibióticas), conservantes como los que se encuentran en las toallas húmedas de limpieza, emolientes y cremas con corticoides o ungüentos o perfumes (utilizados en varios productos de higiene).
Se manifiesta por una erupción en la vulva, con picazón que puede ser leve o severa, acompañado de ardor e irritación. La gravedad de los síntomas depende de la reacción de cada individuo. La molestia puede comenzar gradualmente e ir incrementándose con el uso repetido del producto en cuestión.
El tratamiento debe de ser individualizado, pero el primer paso es suspender el agente agresor. General- mente se aplica una crema con corticoide en el área afectada durante una o dos semanas. Si la reacción es muy severa, se puede utilizar corticoide por vía oral.
Es importante evitar la automedicación y acudir a revisión, de acuerdo a los síntomas y a lo que se observe durante la exploración será el tratamiento que se dará. El primer paso es suspender el agente agresor, además se requiere la modificación de los hábitos diarios, tener un cuidado adecuado de la piel y prácticas higiénicas adecuadas, algunas de ellas son:
• Utilizar ropa interior de algodón.
• Evitar la ropa ajustada.
• Lavar la ropa con detergentes o jabones suaves.
• Evitar el uso de suavizantes de telas.
• El aseo del área corporal debe realizarse con un jabón suave y sin fragancias.
• Evitar el uso de toallas húmedas y duchas femeninas.
• Utilizar toallas femeninas de algodón.