La caída del cabello es normal. Todos tenemos entre 100 y 150 mil cabellos en el cuerpo, la gran mayoría de ellos se encuentran en una etapa activa llamada anágeno, mientras que un porcentaje cercano al 10% se encuentran en una fase de reposo llamada telógeno. Debido a que nuestros cabellos se encuentran en ciclos de renovación constante, los individuos solemos perder entre 80 y 100 cabellos del grupo telógeno diariamente, de tal forma que la caída del cabello puede considerarse como un proceso natural en nuestro cuerpo; sin embargo, cuando la cuenta sale de este rango, la caída es anormal.
Cuando la caída del cabello es más de la cuenta.
En ocasiones, el cabello acelera su evolución y sin haber cumplido el ciclo natural, pasa de la fase activa a la fase de reposo más rápido de lo normal. Esto provoca que más cabellos estén destinados a perderse en los siguientes meses, a esta condición se le llama efluvio. La palabra efluvio viene del latín effluvium; ex: fuera y fluo: fluir. Existen dos tipos de efluvio: anágeno y telógeno. El efluvio telógeno es el más común.
Diversas causas pueden provocarlo.
Algunas de las principales causas de la caída anormal del cabello son: las deficiencias nutricionales de vitaminas, sales minerales y proteínas; la anemia por disminución de hierro; así como alteraciones hormonales en la glándula tiroides. Por otro lado, muchas mujeres experimentan esta caída con el embarazo y en ocasiones, el estrés emocional importante como una pérdida familiar, divorcio o cambio de domicilio, también generan este problema. Y por último, por eventos médicos relevantes como una cirugía, enfermedad repentina grave o fiebre así como algunos medicamentos tales como: enalapril, levodopa, carbamacepina, litio, beta bloqueadores, interferón y ciclosporina.
Saber si tengo un efluvio telógeno.
Comúnmente, la caída anormal del cabello comenzará de 2 a 4 meses después de la situación o evento que desencadenó el problema. Te darás cuenta debido a que los cabellos en la regadera, peine, almohada, incluso mesa de trabajo o escritorio, aumentarán o serán visibles. La caída es poco a poco, pero en algún momento puede provocar que existan áreas más despobladas de cabellos; generalmente se presentan como “entradas”, sobre todo en mujeres; incluso puede existir una sensación de cuero cabelludo sensible. Cuando la causa es más severa y prolongada (cáncer, depresión, ansiedad, anorexia o bulimia) o no pudo identificarse a tiempo, la caída puede hacerse crónica con una pérdida de cabello más lenta y por un periodo más largo.
Existe un especialista para atender este problema.
Si esta pérdida anormal es tu caso, el Dermatólogo, médico especialista en los anexos de la piel, hará una evaluación cuidadosa de tus antecedentes y realizará además algunas pruebas para establecer la causa del efluvio. Este proceso puede comenzar con una prueba de tracción, que consiste en una tracción no dolorosa de algunos mechones de cabello, en caso de que se desprendan más de 4 cabellos, la prueba será positiva y es probable que se apoye el diagnóstico de efluvio telógeno.
Además de esta prueba, quizá sea necesario evaluar al microscopio estos cabellos desde la raíz, es decir, realizar una tricograma, o incluso, llevar a cabo una biopsia, la cual consiste en tomar una pequeña muestra del cuero cabelludo para ser analizarla por un Patólogo de la piel. Los exámenes de laboratorio son de gran ayuda para encontrar la causa, ya que muchas veces, no hay otro síntoma que nos haga suponerlo.
La caída es transitoria, se recuperará.
Es importante saber que este proceso es transitorio y que hay que tener calma, ya que la raíz del cabello no se ha dañado. Lo esperado es que en un lapso no mayor a 6 meses, el proceso se detenga y comience a recuperarse. Para garantizar que esta caída de cabello se frene, es necesario encontrar la causa y darle una solución.
Ya sea de origen nutricional, metabólico o por carencias como el hierro; los dermatólogos te ayudaremos a detener y revertir el proceso lo antes posible. Existen diversas fórmulas tópicas y suplementos orales que podrán ayudarte según tu caso. Si estás padeciendo este problema, acércate a tu especialista de confianza.
Dr. Luis Enrique Sánchez Dueñas
Dermatólogo (CED. 7254446)
Tel. 3620 – 0484 Cel. (33) 1074 – 5260
luis.sanchez@dermika.com.mx