Es una forma de paniculitis (inflamación de la capa de la grasa situada debajo de la piel) que produce bultos (nódulos) sensibles al tacto, de color rojo o violeta, bajo la piel, presentándose como un proceso inflamatorio agudo con las nudosidades que predominan en áreas extensoras de las extremidades inferiores. Las lesiones tienden a involucionar espontáneamente sin dejar ningún tipo de cicatriz, ulceración o atrofia, pero en ocasiones pueden llegar a ser recurrentes. Puede presentarse a cualquier edad, sin embargo la mayoría de los casos se observan entre los veinte y cuarenta años, siendo más frecuente en el sexo femenino. Cuando se presenta antes de la pubertad tiene una distribución similar en ambos sexos. Su primera descripción fue en el año de 1789 por el dermatólogo inglés Robert Willan, y en 1869, el austríaco Ritter von Hebra precisó sus características clínicas proponiendo el nombre de dermatitis contusiforme debido al color (similar al de una contusión) que van presentando las lesiones en su evolución.
Causas
Se asocia a una gran variedad de padecimientos, siendo la causa más frecuente la infecciosa; otras causas incluyen fármacos, enfermedades sistémicas, embarazo y procesos malignos, por ejemplo:
1. Faringitis estreptocócica: se presenta principalmente en niños y adultos jóvenes, donde las lesiones cutáneas aparecen de dos a tres semanas después del cuadro de faringitis.
2. Sarcoidosis: enfermedad e etiología desconocida que afecta pulmón, ojo, piel y ganglios. Las lesiones cutáneas se clasifican en no específicas (eritema nudoso) y las específicas consisten en pequeñas pápulas, nódulos o placas afectando cara, tronco y rodillas.
3. Enfermedad inflamatoria intestinal: siendo el eritema nudoso la manifestación cutánea más frecuente, tiene una mayor asociación con la colitis ulcerativa que con la enfermedad de Crohn. Las lesiones cutáneas aparecen al mismo tiempo o preceden a las manifestaciones gastrointestinales.
4. Medicamentos: una causa muy frecuente; los fármacos más involucrados son las sulfas, bromuros, yoduros y anticonceptivos.
Así mismo, se considera una respuesta de hipersensibilidad a una gran variedad de estímulos (antígenos) que originan la formación de complejos inmunes depositados en las paredes de los vasos sanguíneos de la hipodermis. Se desconoce la causa de predilección en extremidades inferiores, aunque se piensa que diversos factores como el riesgo sanguíneo, efectos gravitacionales del sistema venoso y el tipo de sistema linfático pueden intervenir en este mecanismo. Se caracterizan por la aparición súbita de bultos (nudosidades) de 1 a 5 cm de diámetro, levantamiento mal definido, eritematosos, profundos, más palpables que visibles, calientes y dolorosos, que duran días o semanas y son resolutivos.
Por lo general se localizan de manera bilateral en las extremidades inferiores, afectando rodillas y tobillos, pueden confluir formando placas eritematosas. Al principio presentan coloración rojo brillante y protruyen ligeramente sobre la piel, posteriormente se aplanan tomando un tinte purpúrico y finalmente dejan una apariencia amarillo-verdosa.
El padecimiento es generalmente auto limitado o se resuelve tratando el problema de base. En algunos casos el reposo junto con medicamento pueden controlar los síntomas, sin embargo aunque en muchos casos es idiopático, puede ser el primer signo de una enfermedad sistémica y por lo tanto, un diagnóstico correcto permite establecer un
tratamiento etiológico específico, por lo que si se llega a tener este tipo de lesiones deberá acudir con un médico especialista.
Dra. Minerva E. Vázquez Huerta
Medicina Interna
(CED. prof. 9007429)
Dermacenter
minivaz8@gmail.com