La enfermedad de las venas comúnmente llamada “venas varicosas” “varices” o el término médico insuficiencia venosa, ocurre cuando las venas de las piernas no funcionan correctamente.
Normalmente, las venas de las piernas son las encargadas de llevar sangre de las piernas al corazón, éstas tienen un sistema de válvulas que permiten que la sangre fluya en una sola dirección; sin embargo, cuando éstas se encuentran dañadas o no funcionan bien, puede generar que se acumule sangre en las piernas dando diversos síntomas como :
• Dolor en la pierna o sensación de cansancio o pesadez.
• “Hinchazón” en la parte inferior de las piernas o los tobillos.
• “Venas inflamadas” en forma de “arañitas” o “venas varicosas”.
• Cambios de color en la piel rojizo o marrón – rojizo.
• Incluso formar úlceras que generalmente se presentan en el tobillo y pueden ser dolorosas.
Su médico en ocasiones puede solicitar un ultrasonido de las extremidades para corroborar el diagnóstico o verificar el grado de compromiso del mismo.
Existen algunas medidas que puede llevar en casa para disminuir la hinchazón.
• Elevar las piernas por encima del nivel del corazón durante 30 minutos.
• Apuntar los pies hacia abajo y hacia arriba (movimiento desde el tobillo) varias veces a lo largo del día.
• Tratar de no permanecer en la misma posición (parado o sentado) durante mucho tiempo.
• Lavarse las piernas con un limpiador suave, ya que el jabón regular puede hacer que la piel esté más seca.
• Crema hidratante sin perfume.
Como tal el tratamiento de la insuficiencia venosa debe ser dictado por un médico, primordialmente un especialista en el área, como un médico angiólogo, ya que él determinará el tipo de tratamiento requerido ya que estos puede incluir:
• Medias de compresión o calcetines especiales, que incluso le dirá como ponerlos y de qué medida usar, ya que éstas deben quedar bien ajustadas.
• Medicamentos: éstos pueden ser para diferentes síntomas como ácido acetilsalicílico, antibióticos en caso de que se presente infección o flavonoides.
• Terapias invasivas: escleroterapia, radiofrecuencia o ablación láser, ligadura o extracción de la vena.
Como podemos ver, existen múltiples terapias que se pueden indicar al paciente que presenta síntomas de insuficiencia venosa, sin embargo el tratamiento es personalizado y depende de los signos y síntomas que presente, así como sus antecedentes, por lo que su proveedor de atención médica es la mejor fuente de información para orientarlo de manera adecuada sobre el tratamiento a seguir.