El escroto es la bolsa de piel que aloja los testículos y los cubre; esta piel se encuentra más propensa a ser irritada por la fricción de la ropa y la humedad de la zona en donde se encuentra.
El liquen simple escrotal es un trastorno cutáneo que aparece como consecuencia de un rascado crónico y persistente. La barrera de la piel se encuentra alterada, estableciéndose un círculo vicioso de comezón-rascado-comezón. En las primeras etapas, la piel tiene un aspecto normal, pero pica. Luego aparecen sequedad, escamas, engrosamiento y manchas oscuras como consecuencia del rascado y el frotado crónico.
La causa inicial de este picor es variable: enfermedades de la piel (por ejemplo, dermatitis atópica), enfermedades sistémicas, estrés y/o trastornos psicológicos. El rascado crónico y persistente puede provocar heridas, infecciones bacterianas en la piel o cicatrices permanentes y cambios en el color de la piel (hiperpigmentación o hipopigmentación). También puede afectar el sueño, la función sexual y la calidad de vida.
Los objetivos principales del tratamiento del liquen simple escrotal son:
- Evitar factores exacerbantes.
- Romper el ciclo de comezón-rascado.
- Tratar cualquier dermatosis subyacente o condición predisponente.
- Restablecer la barrera cutánea normal.
Es necesario evitar:
- Uso de ropa muy apretada, tanto pantalones como calzoncillos.
- Uso de ropa interior sintética que no permita la adecuada transpiración y que como consecuencia produzca un exceso de humedad en la zona.
- Uso de jabones agresivos o con aromas en pieles sensibles.
- Uso excesivo de detergente en la ropa interior.
El diagnóstico de liquen simple es clínico y es necesario abordar al paciente de una forma integral. Los pacientes deben ser educados sobre el círculo vicioso de rascarse/ frotarse y la manera de evitar hacerlo en forma repetida; los antihistamínicos y los corticoesteroides tópicos ayudan a controlar la comezón, pero debe evitarse la automedicación, por lo cual es importante acudir con el especialista para su tratamiento.