La zona ano-genital es un área susceptible a distintas enfermedades dermatológicas como: la dermatitis seborreica, dermatitis atópica, psoriasis, liquen simple crónico, dermatitis alérgica o irritativa de contacto, incluso lesiones premalignas o malignas. Debido a lo sensible de esta zona también es frecuente observar cuadros mixtos en el que la dermatitis prexistente empeora debido a factores irritantes externos.
La psoriasis en una enfermedad crónica de la piel que se caracteriza por áreas inflamatorias, eritematosas y con escama, sin embargo, cuando se presenta en genitales, carece de la escama característica de la forma clásica de
la enfermedad.
La psoriasis en genitales aparece en 2/3 de los pacientes que padecen de psoriasis en placas y rara vez lo hace de forma aislada. Los hombres son los más afectados y suele aparecer después de los veinte años de edad, en quienes afecta el pene, escroto y glande, sin diferencia entre hombres circuncidados y no circuncidados. En mujeres suele afectar vulva y perine y en ambos puede afectar el pliegue intergluteo. El síntoma más común es el prurito (comezón), dolor, ardor y dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales). Los factores que pueden desencadenar el empeoramiento de las lesiones de psoriasis incluyen: estrés, traumatismos, medicamentos (litio, β-bloqueantes, AINE, inhibidores de TNF-α e interferones), fricción e infecciones. Muchas veces el diagnóstico se retrasa debido a que el paciente prefiere no acudir a consulta debido al pudor que les genera la exploración física, lo que lleva a que el cuadro pueda ser enmascarado por infecciones agregadas o incluso empeorar debido a la automedicación.
La psoriasis de cualquier tipo conlleva un gran impacto social y emocional para el paciente que padece la enfermedad. La afección genital influye además de forma negativa en la vida sexual del paciente ya que algunos pueden tener la falsa creencia de “tener alguna enfermedad de transmisión sexual”. El tratamiento incluye el uso regular de emolientes suaves, uso de sustitutos de jabón, evitar posibles factores agravantes como estrés, exceso de lavado, uso de toallitas perfumadas y calor. Dentro del tratamiento médico se busca reducir los síntomas causados por la inflamación el cual podrá ser tópico o sistémico dependiendo de la gravedad del cuadro, por lo que es muy importante que acudas con tu dermatólogo para un diagnóstico y tratamiento oportuno.
Dra. Clara Madrid Carrillo
Dermatóloga
(CED. prof. 8968271)
Dermacenter
clara_x89@hotmail.com