El paso del tiempo es un factor que no podemos modificar, sin embargo en la actualidad existen numerosos tratamientos dermatológicos que permiten contrarrestarlo y dar como resultado un rejuvenecimiento de la piel.
Anteriormente estos tratamientos se limitaban a la cara, dando lugar a un marcado contraste entre la piel de esta zona y la del cuello, cuyo cuidado se encontraba relegado, aun cuando ambos se someten a las mismas agresiones y por tanto envejecen de forma paralela. En la actualidad esto se evita al tratar y mejorar de manera conjunta tanto el rostro como el cuello.
El envejecimiento cutáneo se manifiesta con flacidez, arrugas, manchas, enrojecimientos, piel áspera y venas dilatadas, entre otras, derivadas del paso del tiempo y sobre todo, del daño solar acumulado.
Para solucionar estos problemas se cuenta con una diversidad de opciones disponibles, entre las cuales se podrá elegir dependiendo de las necesidades individuales de cada persona:
• Botox. Permite mejorar el contorno y disminuir tensión en músculos, que dan lugar a arrugas horizontales y a bandas verticales.
• Fillers. Destacan el ácido L-poliláctico, ácido hialurónico y la hidroxiapatita de calcio, que permiten rellenar arrugas y estimular a que el paciente genere colágeno (bioestimulación).
• Peeling. Cada vez menos usados, por la aparición de tecnología que permite resultados más evidentes, con menos riesgos y efectos secundarios.
• Equipos basados en energía. Son numerosos los equipos con los que contamos en la actualidad, entre los que destacan:
– Láser Co2 y Erbio, son los principales en el rejuvenecimiento de la piel, dando mejoría en color, textura, firmeza y arrugas.
– Luz pulsada intensa (IPL), útil en pacientes con rojeces, venas dilatadas y manchas.
– Láser Nd:YAG, ideal para el tratamiento de man- chas oscuras.
– Láser de colorante pulsado. Capaz de atenuar rojeces y venas dilatadas.
– Ultrasonido focalizado. Logra una contracción in- mediata de la piel y formación de colágeno nuevo.
Aunque hay tratamientos que pueden mejorar varios aspectos del envejecimiento, la mayoría de las veces será ideal su uso combinado, para ofrecer un resultado óptimo. Por ejemplo, en el caso de una persona con flacidez y manchas, una posibilidad sugerida sería combinar ultrasonido focalizado y láser Nd:YAG. En la próxima cita con tu dermatólogo pide una valoración y platiquen sobre las opciones para el rejuvenecimiento de la piel de tu cuello.
Dr. Juan Enrique Paniagua Santos
Dermatólogo
(CED. prof. 7715724)